
Se crea o no, la sala de conciertos del Heino Eller Tartu Music College puede cambiar su configuración en cuestión de minutos: las 198 butacas de la platea están montadas en una viga que tiene un sistema de raíles integrado en el suelo de la sala. Así, todas las butaca se pueden mover por esta sala multiusos en función de las necesidades de cada ocasión. Todos los arquitectos encargados de este proyecto, desde Lea Järve-Eeronen y Erik Soasare de Järve & Tuulik hasta Anu Ahi de Koko pusieron sobre la mesa una solución innovadora para este nuevo edificio: el conservatorio podría usar la misma sala para diversos propósitos en lugar de la idea inicial de tener sólo una sala de conciertos.
Los 95 años de historia de esta institución no pesaron a la hora de considerar la propuesta más revolucionaria: ¿se necesita máxima capacidad para un concierto? entonces se distribuyen todas las filas ¿sólo es necesario la mitad del aforo para una clase magistral en la que profesor y alumnos puedan interactuar en un mismo espacio? saquemos sólo la mitad de las filas ¿un espacio totalmente vano para una celebración? ¡entonces movamos todas las filas a la parte trasera de la sala y ocultémoslas detrás de la cortina!
Así ahora pueden disfrutar del auditorio, de la clase más grande de toda la escuela y del espacio vacío de mayores dimensiones en un espacio común. ¿No es esto una sala verdaderamente multiusos?
La zona de la Platea está compuesta por 11 filas de 18 butacas en las que cada fila tiene dos grupos de 9 butacas con el fin de que su movimiento sea suave y sencillo para ser manejado por una sola persona. En el caso de que se necesitase reconfigurar la sala solo habría que retirar las tapas que ocultan el rail de aluminio, desbloquear el freno de seguridad y empujar todos los grupos tranquilamente hasta su lugar de almacenaje.
Este proyecto se diseñó para butacas Space Plus que se almacenan en la parte posterior de la sala pero si fuese necesario nuestra empresa también puede realizar el estudio de ingeniería necesario para guardar las butacas bajo el escenario.