
State Academic Ballet & Opera House, Ekaterinburg
UBICACIÓN:
Ekaterinburg (RUSIA)
ARQUITECTO:
V.I. Smirnov (1912)
MODELO BUTACA:
TRAVIATA
ENLACES DE INTERÉS:
uralopera.ru
El teatro de la Ópera y Ballet de Ekaterinburg es uno de los palacios de la ópera más antiguos de Rusia que en el año 2012 cumplió 100 años de actividad: en 1912 se inauguró con la presencia del zar Nicolás II y una ópera de Mikhail Glinka. Dentro de los actos enmarcados con la celebración del centenario, la ciudad de Ekaterinburgo decidió acometer una reforma integral del edificio entre la que se contemplaba un patio de butacas nuevo. El modelo Traviata fue el elegido, una butaca de aspecto clásico en el que destaca su estructura de madera maciza. Esta butaca presentaba una serie de características que la hacían la más adecuada para el proyecto; en primer lugar, y desde el punto de vista estético, el modelo Traviata tiene un diseño exterior clásico propio del siglo XIX gracias al predominio de la estructura de madera visible tanto en los costados (pies) como en el respaldo. Igualmente esta butaca realizada enteramente en madera maciza ofrece un elemento fundamental para este proyecto en particular: flexibilidad para modificar prácticamente todas sus partes.
Al tratarse de un edificio histórico en el que era imposible realizar modificaciones estructurales y tampoco perder ni un solo asiento del aforo original se tuvieron que realizar una gran variedad de butacas de diferentes características y tamaños para cada una de las secciones del teatro: Platea, Anfiteatro inferior, Anfiteatro Superior y Gallinero. Para optimizar la visibilidad se optó por fabricar respaldos con dos alturas y cuatro tipos de inclinación en función de la zona del teatro (más recto y alto conforme se asciende por los diferentes espacios del teatro). Igualmente se fabricaron dos tipos de butacas diferentes en función de su estructura: individuales con dos brazos por butaca para las mejores localidades situadas en la zona frontal de la platea, junto al escenario, y de brazo compartido para el resto del edificio. Además de esta diferencia en cuanto al número de pies por butaca se fabricaron hasta seis anchos entre ejes diferentes con el fin de lograr un doble objetivo: la mejor visibilidad posible con una distribución al tresbolillo y un alineado perfecto con los pasillos laterales de acceso.
Finalmente este teatro presentaba una dificultad añadida en cuanto a la fijación de las butacas: tres tipos diferentes en función de la zona del teatro que añadieron más combinaciones a la ecuación de fabricación de las butacas. En la zona de la platea el suelo era en pendiente, en los anfiteatros rasante y en el gallinero con un sistema especial que requería que las butacas se fijasen directamente sobre unas gradas que hasta entonces no tenían asientos y que con esta reforma lograron una mejora sustancial en cuanto a la comodidad.