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Este proyecto realizado en el corazón de Moscú es un ejemplo de cómo en un mismo espacio se han aplicado diferentes soluciones de butacas multiusos. Por un lado estaba la necesitad del cliente de tener dos salas, una grande y otra pequeña, en las que poder realizar diferentes eventos en función de sus necesidades; así mientras la grande se concebía como un espléndido auditorio, la pequeña era tratada como un aula de formación. Sin embargo, ambas deberían tener la posibilidad de transformarse en cuestión de minutos para ofrecer usos alternativos; un gran espacio de reuniones intergubernamentales en el auditorio y una sala de recepciones en la pequeña.

Esta gran obra se acometió en el interior del edificio sin que afectase al trabajo habitual de los funcionarios; dos plantas subterráneas completas se vieron afectadas en la reforma y como resultado de ello se obtuvieron los dos espacios requeridos: un gran auditorio con platea + balcón y una pequeña sala en planta baja. Y para ambos, las soluciones fueron diferentes y personalizadas.

Así, en la platea del auditorio se distribuyeron 239 butacas Space Lux con un sistema Kangoo Automático que las oculta bajo el suelo en cuestión de minutos. Mientras, en el Balcón se insertaron 24 butacas Space Lux Parlamento en cada uno de los dos pasillos laterales y 99 butacas fijas en la parte posterior. Finalmente en la sala auxiliar de la planta baja se dispusieron 54 butacas Space Lux con sistema Matrix móvil en grupos de 3 con dos carros de transporte. Y no sólo empleamos 4 versiones diferentes del mismo modelo Space Lux sino que también completamos las opciones con 3 anchos y 2 alturas diferentes.
La parte más espectacular de toda la obra la componen las butacas operadas con el sistema Kangoo automático; tanto los grupos laterales de 3,4 y 5 butacas como los centrales de 13 y 17 se ocultan dentro de un sistema de cajones metálicos situado en el subsuelo de la sala. El funcionamiento está centralizado en una tableta que el cliente acciona para subir o bajar el número de filas necesarias para cada uso, tanto la sala completa como unas filas determinadas.

Igualmente interesante es la solución adoptada para los pasillos del balcón; butacas dispuestas individualmente sobre un rail de aluminio encastrado en el suelo. Las butacas se encuentran alineadas junto a la barandilla pero cuando el espectador la necesita sólo tiene que moverla hacia sí, sentarse y situarse en el lugar deseado. Una vez se levante, la butaca volverá automáticamente a su posición original.

En resumen, una sala multiusos que puede cambiar de fisonomía en apenas 15 minutos gracias a la combinación de opciones y modelos propuestos.